Dijiste no llores, No llores

Como dejar de sentir esta braza caliente
Que me quema el pecho
Como negarle a mis ojos su derecho a
Sentirse tristes, a mis mejillas sentir el tibio frio
De las lágrimas que las recorren como ríos
Caudalosos arrastrando pena, dolor y culpas,
Como negarle a mis labios sentir el sabor
Salado del consuelo, de la redención y el perdón.